jueves, 24 de junio de 2010

Factoría Naval de Marín

El conselleiro de Industria anunció ayer que preparará un plan de rescate para las auxiliares de Factoría Naval de Marín en caso de que el astillero no salga del concurso de acreedores. Se le ha acabado la paciencia y con razón. El supuesto interés de los accionistas por ampliar el capital llegados a este punto no cuela. ¿Por qué no se hizo antes? ¿Por qué todo el mundo ha puesto muchísimo de su parte y ese sacrificio no ha tenido respuesta en el consejo de administración de Factoría Naval? Durante los primeros meses de la crisis económica, en Estados Unidos se acuñó el término ‘demasiado grande para caer’ para referirse a los bancos e instituciones tan importantes que resultaba imposible que quebraran porque, de hacerlo, provocarían un problema mayor. Quizás Factoría se creyó demasiado grande para caer. Ahora, tras agotar al resto de actores implicados, se asoma al abismo arrastrando todo a su paso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario